Por mucho tiempo, los pantalones industriales han sido sinónimo de formalidad, y en algún sentido, de neutralidad y poco brillo: algo aburrido, demasiado rígido para las nuevas generaciones, siempre en búsqueda de algo retador y desafiante. Sin embargo, de un tiempo para acá, ha sido notorio un resurgimiento de los pantalones industriales, no sólo por ser cómodos y económicos, sino por su versatilidad y frescura: es decir, han encontrado su nicho.

Esta tendencia ahora nos permite asociar a los pantalones industriales no sólo con una imagen formal, sino con un “look” casual, más desenfadado, mucho más juvenil y atractivo. Ahora se puede combinar un pantalón tipo dockers lo mismo con una camisa tipo Polo, una playera e incluso una camisa mucho más elegante, sin temor a estar “fuera de lugar” en el terreno de la moda, sino al contrario, en consonancia con éste.

pantalones dickies

Es decir, las posibilidades de recombinación de esta prenda con un rango más interesante de ropa la ha llevado a nuevos estándares en el mundo de los diseñadores, colocándola en un creciente uso día a día por parte de los consumidores en todos los niveles de la sociedad: no hace falta ver muchos sitios webs de afamadas firmas del “fashion industry” para darse cuenta que los pantalones industriales han regresado con una fuerza inusitada… esta vez para quedarse.

Inicialmente creados para un público masculino, los pantalones industriales han imprimido desde su comienzo un sello inconfundible de distinción; sin embargo, las damas no se han quedado atrás: ya sea en ambientes formales o en otros más casuales, los pantalones industriales son igualmente utilizados por mujeres que buscan sentirse cómodas en un “look” sobrio pero no demasiado conservador, mostrando a la vez elegancia y buen gusto. Chicas seguras de sí mismas, sin miedo a los estereotipos sociales que puedan venir desde afuera, de contextos demasiado prejuiciosos.

En Rozen, nuestros pantalones industriales son de la más alta calidad en varios niveles. Empecemos por su composición, el material con el que están hechos: el hecho de que estén elaborados con 65% de poliéster y 35% de viscosa, hace que sean prendas muy frescas y a la vez resistentes, suaves al tacto pero altamente duraderas.

Gracias a su diseño moderno, nuestros pantalones industriales son la mejor opción para uniformes, logrando que un empleado o una persona que forme parte de una empresa o de un corporativo, proyecte una imagen de orden y pulcritud que es difícil de transmitir con otro tipo de pantalones, todo esto sin perder la comodidad y confort que estas prendas ofrecen. La sobriedad de los colores, la neutralidad de su línea, y demás atributos positivos con que estos pantalones fueron diseñados, son aspectos que uno no puede simplemente ignorar a la hora de la elección de una prenda para ir a trabajar, una que nos guste y que nos produzca placer portar, como debiera de ser.

Como hemos dicho, uno de los atributos más destacados de estos pantalones es su excelencia en materiales, lo que asegura una larga duración: no importa cuántas veces los usemos al año, ni en cuántas ocasiones lo metamos a la lavadora, siempre se verán como nuevos, conservando un aspecto radiante, sin desgaste alguno. Las costuras reforzadas de alta resistencia le brindan a esta prenda durabilidad sin límites, pudiendo realizar un sinfín de tareas sin temor a que se rompan o se desgarren en pleno acto: sin duda un penoso incidente. Esto no suele pasar con nuestros productos, ya que, en Rozen, nos esmeramos para que todas y cada uno de nuestros modelos de ropa conserve un alto estándar de calidad, en todos los sentidos.

Fáciles de lavar en casa, los pantalones industriales son amigos de nuestro tiempo libre ¿Cuántas veces nos hemos visto en la penosa necesidad de volver a meter una prenda a la lavadora por su dificultad para lavarse? Esto no sucede con nuestros pantalones: en un dos por tres están limpios de nuevo, listos para ser usados por lo menos otra semana, sin riesgo a que se desgasten demasiado pronto gracias a su durabilidad, como ya dijimos, otra de sus destacadas cualidades.

Ahora, hablemos un poco de su presentación. Elaborados con gabardina maranelo de alta calidad –un material de por sí elegante–, Rozen ofrece sus pantalones industriales en tres colores principales, todos ellos sumamente distinguidos: caqui, azul marino y negro.

Los pantalones industriales en color caqui son un clásico: incluso, en Norteamérica y otras partes del mundo, a este estilo genérico de pantalones se les ha denominado como simplemente “khakis” (caquis), siendo la elección de muchos turistas y gente del extranjero con alma viajera; incluso han llegado a las pasarelas por ser una prenda neutra pero amigable a la vista, y combinada con las prendas adecuadas, puede llegar a proyectar una actitud de renovación y bríos juveniles.

El color azul marino, un poco más discreto, también es sinónimo de elegancia y distinción, pues, al ser un color obscuro, nos permite una mayor maniobra. Y el color negro, bueno…. ni se diga; probablemente sea el color más versátil que existe, pues se ve bien casi con todo, no existe algún color o tono que no pueda ser intercalado con el negro: los pantalones negros han llegado a colocarse en el gusto de todos, por igual para damas que para caballeros.

¿Qué esperas? ¡Ven por los tuyos! Tenemos todas las tallas, a un precio increíble. Estamos seguros de que no te arrepentirás.